Cambiarse de localidad en el Calderón es como comenzar el curso escolar en un nuevo instituto. Que sí, que los asientos están igual de sucios arriba que abajo (no han debido de tener tiempo de adecentarlos un poquito), que los baños dan el mismo asco que los de una sala de macroconciertos, aunque los nuevos tienen mayor profusión de telarañas y algo más de variedad entre sus inquilinas…
Además todos sabemos que los especímenes que pueblan nuestra grada se repiten cada tantos metros cuadrados: el señor del puro, la señora que grita, los tres jevis que comparten porros, el gordo con la equipación de Puma, los dos hermanos de gafas que llevan los cascos puestos, el chico de Fuenlabrada que se come un bocata de 19,69 pulgadas repleto de salchichón, el entrenador frustrado o el calvo que tiene tirria a un jugador y desea compartirlo cada medio minuto con todo el estadio.
Pero aún así, aunque el escenario y el atrezzo sean parecidos, debutar en un nuevo asiento no deja de ser como enfrentarte a nuevos compañeros de pupitre que llevan juntos muchos años. Y sabes que si tienes suerte caes cerca de los jevis, los hermanos y el chico de Fuenla y si la tienes mala… el calvo, el entrenador y la señora te dan la temporada.
La verdad es que he tenido suerte. A mi derecha, se sienta Alberto, que aunque todavía no se ha hecho con la elástica de Asenjo y está preocupado porque en la página china donde las compra no tengan su nombre, en los primeros 10 minutos ya había compartido con todo el sector 214 su procedencia palentina y su debilidad por el nuevo portero, las pipas Facundo y el Cristo del Otero. Me ha prometido demostrarme matemáticamente porque el Fondo Sur y el Fondo Norte no pueden entonar el mismo cántico de forma sincronizada. Ya les contaré.
A mi izquierda una chica muy mona con una indumentaria muy inadecuada para un día de partido. Inadecuada para mí, claro, que el resto de la grada y su orgulloso acompañante la encontraban de lo más apropiado para este tipo de espectáculos. Delante otras chicas (cada vez más chicas jóvenes en el Calderón, qué alegría) y atrás, el típico grupo de amigos de toda la vida que tienen motes propios para cada jugador, que recuerdan anécdotas de sus partidos juntos y que nos marcan su territorio nada más llegar.
- ¿Asenjo?, ¿Asenjo os gusta?, pero si tiene el culo gordo. Perdón, tiene el culo muy, muy gordo.
- Bueno sí, es que mi amigo es de Palencia y nosotros entonces somos de Asenjo, pero también somos de Johny, de Maxi y de Raúl García (de lo de Jurado no digo nada, porque es el primer día y hay cosas que nunca pueden decirse los primeros días sin que puedas granjearte la desconfianza de los demás de por vida).
- Pues muy bien, chavales, nosotros somos también de Johny, pero también de Antonio López y Assunçao. Bienvenidos a este sitio, aunque en vuestros asientos caen todas las pipas de arriba y tenéis una gotera justo encima.
- Pues muchas gracias. No te preocupes que allí arriba también teníamos lo nuestro.
Y acaba de empezar el partido y a los cuatro minutos te das con ellos el primer abrazo de celebración. De esos abrazos que se dan en el fútbol… porque esto es como en la Iglesia que das la paz a la venerable ancianita de al lado, aunque sospeches que no riega sus plantas y es de las que se cuela en la cola del súper.
La verdad es que fuera del Calderón, nadie me ha abrazado así, con tanta efusividad y alegría. Ni siquiera mi padre cuando me saqué a la quinta el carné de conducir, ni mi madre cuando le anuncié que definitivamente me marchaba de casa. Abrazos que unen a la milf con el jevi y al chico de Parla (¿o era de Fuenlabrada?) con el señor mayor que remata el abrazo con una cariñosa colleja.
Y a los cuatro minutos ya te sientes como en casa, como si desde ese mismo asiento hubieses visto aquel gol de Alemao o llorado cuando nos eliminó el Sión.
El resto del partido transcurre plácidamente. Poco fútbol para comentar, lo suficiente para meternos en la Champions, la de verdad, la buena y garantizarnos tres nuevas noches europeas. Que algunos lo celebran como si fuese un logro más que una obligación, aunque bien pensado el chico ese del chándal (sí hombre, el de Fuenlabrada) no ha conocido otro Atleti que el que nos robaron los Gil, no es cuestión de avinagrarle su fiesta.
Y se ve un encuentro que certifica que con el once titular podremos ganar muchos partidos, pero que si no llegan refuerzos vamos a pasarlo mal. Un partido para que veamos que Heitinga puede dar mucho juego en el lateral. O para que podamos pensar que por fin llega a la portería un sucesor a la altura de Molina. O para que recemos por tener al Kun durante muchos años y siga marcando goles como el segundo de ayer.
Porque cuando menos te lo esperas. Termina el primer partido del nuevo curso escolar y abandonas contenta tu nuevo asiento, mientras los de atrás siguen bromeando, el señor apaga su puro y los dos hermanos de gafas se hablan por primera vez – ya en las escaleras- para comentar con profusas estadísticas y datos contrastados las distintas posibilidades que nos pueda deparar el bombo el próximo jueves.
Estamos en Champions. En un asiento de Champions.
26 comentarios:
Qué curioso, en tu foto parece que haya más público que el que se vio por la tele.
Suerte la tuya de poder ir al Calderón cada semana y tener ese sitio privilegiado. Yo iré para el del Almería, a ver cómo se portan poniendo los precios de taquilla, porque me veo otra vez en el segundo anfiteatro de fondo sur con los prismáticos.
Un abrazo.
La foto no es del partido de ayer. Así que podemos consolarnos de que no todos los que están en esa foto pagaron los 20 euros del atraco.
Un abrazo y toda mi admiración para la gente del Atleti que no vive en Madrid.
Hele
¡Qué gozada de crónica!
Estamos en la Champions. Vale. Servidora se apunta a las pipas, a la gotera y a los abrazos.
Inclusive a correr los encierros de Donostia of de kings, a cambio de un marcador como el de anoche.
¿pero otra vez te has cambiado de sitio? no paras quieta, ni que estuvieras amenazada.
Curiosa tu descripción de tus vecinos de localidad, si casi son los mismo que tengo yo, salvo la chica con ropa inapropiada, sospecho que en mi zona no levantaría recelos.
Siempre con trampas, publicas fotos de otros partidos, y yo quejándome de las manipulaciones de Marca.
Bueno, lo importante era la clasificación, ahora a ver que nos depara el sorteo (un inglés seguro) y a soñar con la final en el cuernabéu (¿por qué no?).
Un besazo y saludos desde http://derojoyblanco.blogspot.com
jajajajajaja, Hele el tío no era de Fuenla, era de Parla, vete a Parla a...
Este año a ver quien se "ríe" mas de quien.
Ya estoy deseando esas pizzas los viernes.
Un besazo.
¡No vea qué susto, doña Hele!: pensé que el segundo gol lo había metido Jurado (y no es coña).
Informo a los lectores que poco antes del encuentro, D. Paul prometió a esta servidora que si Jurado mojaba cruzaba la Castellana (a la altura de Cuzco) de rodillas.
Espero de usted una rectificación que si ha sido capaz de reconocer que ha pasado el verano escuchando una canción de la Velvet, hará lo propio con el gaditano. Tiempo al tiempo.
Veo que sigue la suciedad en el Calderón. Seguro que la bolsa de pipas que deje en mayo, sigue en su sitio.
no entiendo como se paga una entrada que se dice un atraco. No logro entenderlo. Yo no fui por eso pues era un atraco.
El partido no dio para mucho. Los griegos fueron hermanitas de la caridad.
un abrazo.
No soy del Atleti, pero espero que llegue muy lejos en la Champions y en la Copa. Así juegan más partidos y podemos leer más crónicas como esta.
Doña Hele, ¡Un respeto para los calvos que tenemos tirria a un jugador!
Mr. Marble ha, porfin, escuchado Velvet?
Sí, D. Vito. El Rock and Roll concretamente. Nunca es tarde para rectificar (aunque las tirrias sean calvas)
entre la Velvet y los gaditanos, según se prometió antes de gastarese uno una fortuna en cupones de la once
http://es.wikipedia.org/wiki/Silvio_Fern%C3%A1ndez_(m%C3%BAsico)
http://www.youtube.com/watch?v=ePFpDlx7V0E
avanti con la guaracha!
pongo otro, que el número me desasosiega
Pues la verdad es que mi sitio si se había limpiado, no sé si habrá sido el Club o algún espectador escrupuloso de algún concierto
Has vuelto inspirada y nosotros que lo agradecemos.
Eché de menos un poco más de empeño en los futbolistas para hacer disfrutar a todos los que asistimos al partido, sobre todo porque anoche había bastantes niños que asistieron al campo, por aquello de que aún están de vacaciones.
No me gustaron los pitos a Jurado ni a Reyes. Hay que gente que no piensa.
Un abrazo.
Madre mía que honor aparecer explicitamente en una crónica futblogera; he tenido que ir a por una cerveza y un cigarro y releerlo 6 o 7 veces.
Genial el texto, como casi siempre, que de cuando roba los encabezamientos prefiero mejor no hablar. He dejado todo ese tema en manos de la SGAE, que al lado de los Gilmar parecen Robin de Sherwood.
Y sólo una cosa más, he arrancado con los trámites para la creación de la peña Asenjo, no sea que alguien se me adelante, y he encargado 10 camisetas del C.D. San Juanillo, con el nombre y número de mi paisano y el cristo del Otero serigrafeado en las mangas rematando a puerta un balón de champions y con los manos haciendo cuernos, como debe ser.
Un abrazo, saludos a todos los que ví en la previa que veo que pasan por aquí y ya nos vemos para celebrar el premio de los ciegos esos que ven más que yo y se aprovechan de los que vamos ciegos de verdad.
-Madre mía, que tocho.
-Lo sé, dejeme, que me hace ilusión.
-Tiene usted razón, lo siento.
Pues eso, salío el atleti de rojo y blanco....
:)
Lo de la suciedad en el Calderón es de traca. Nadie se cree aquello que dijo Cerezo de que la limpieza del Calderón les costaba un 'huevo'. Mi asiento lleva meses semi-arrancado, y ayer seguía igual. Supongo que estará así toda la temporada, provisto, además, de la mierda (con perdón) que tiene incrustada.
Respecto a los baños, llegué al estadio 35 minutos antes del inicio del partido, y en los servicios de caballeros, los urinarios estaban a rebosar. De verdad, asqueroso. Yo creo que no los limpiaron tras el concierto de Madonna el pasado mes de julio.
Saludos
Hola Hele, es un auténtico placer volver a leerte tras tu dilatada ausencia el año pasado. Espero que hayas vuelto para quedarte.
Así que nuevo asiento ¿eh? Seguro que más caro, cómo se nota los que somos pudientes...
Yo estoy esperando salir de pobre para llevar a mi padre a un 'colegio de pago', aunque a mis actuales compañeros de pupitre pues ya uno les ha cogido cariño.
Veo que haces rápido amigos. ¡¿4 minutos y ya repartiendo abrazos...?!
Yo con Burney, el patillas, el ejecutivo y el calvo (el mío sin puro) tarde en darme abrazos casi dos años. Soy muy comedido ;)
Yo también confirmo que no se puede cantar sincronizado, de hecho yo mismo a menudo voy desfasado con el Frente, y los tengo justo abajo.
Y sobre la foto, podría ser del martes (aunque se ve que no), pero te habrás fijado que desde los fondos el lateral siempre parece más lleno (se cubren las espaldas los unos a los otros los jodios...).
Por último recomendarte un blog que fata en tus Links y me han dicho que es canela fina http://ungrandesinmemoria.blogspot.com/
El viejo Un Grande sin Memoria murió. O bueno, lo mataron. Pero ya se sabe, los buenos siempre vuelven.
Un beso!!
Arreglado, Jose I.
Muchas gracias
Pues vaya suerte tiene usted con los compañeros de grada, mi padre y yo hemos cambiado un par de veces y cuando no nos tocan los que silban a Pernía, damos con los que proclaman que sería bueno vender a Agüero al Manchester.
Eso suena a Tribuna, Perro. Me equivoco?
Primer anfiteatro, siempre cerca del ramo de Pantic.
Precioso blog, por cierto, lo de la zona Cesarini me ha conquistado.
Muchas gracias. Un excelente piropo de alguien que demuestra su buen gusto escuchando el Live at Leeds (aunque sea en la luna)
Un abrazo
Hele
Yo llegué a pensar que Cleber y Juradín habían aprendido a chutar en Mallorca.
Ya se vió que no.
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