martes, 13 de enero de 2009

Opiniones, sentimientos y el nuevo Atleti



Me gusta pasarme a diario por el foro de opinión atlética de Señales de Humo. Allí encuentro, a gente que sabe mucho de fútbol y futbolistas, capaces de debatir durante cuatro páginas las ventajas e inconvenientes de un determinado sistema de juego o las cualidades de un chaval de la cantera al que siguen en el Cerro del Espino.

Y lees textos excelentes firmados por un tal Panadero Díaz o Pereira o Leivinha o Mendoza o Kiko o Futre. Pseudónimos (nicks, como se dice ahora) de viejas glorias atléticas bajo los que se discuten con pasión las actuaciones de determinado jugador, el sistema de Javier Aguirre o las alineaciones elegidas para enfrentarse al equipo de turno.

Pero sobre todo me gusta estar en esa casa, porque encuentro a gente que se siente como yo. Ciclotímica, bipolar, vehemente... en la victoria y en la derrota. Gente que reacciona y se expresa tal y como yo me siento cuando encadenamos quince partidos sin perder o cuando se da una pésima imagen, como la de los últimos tres partidos.

Y una que se encuentra, ya saben ustedes, en pleno proceso de desarraigo con la afición atlética, que no entiende ni que el fondo sur bote con una tonadilla alegre cuando perdemos 1 a 3 con el Athletic, ni que el resto del campo grite enfurecido el “Aguirre, vete ya” y no dediquen uno sólo de sus pitos a los verdaderos causantes de tanto desatino, pues me siento identificada con las cosas que allí se dicen, (se postean, se dice ahora) pero sobre todo con las sensaciones que genera nuestro equipo.

La pasada semana tras la casi segura eliminación de la copa del Rey alguien escribió un mensaje (topic, se dice ahora) titulado “no aguanto más”. Se trataba de una reflexión, probablemente en caliente, sobre las repercusiones de los 20 años de “gilismo” en su estado de ánimo, tras 25 años como abonado y mirándose en el espejo de su hijo que por primera vez no había querido ir al fútbol.


“Pero de camino al campo, solo una vez más entre tantos extraños con bufanda del que era mi equipo, me invadió una tristeza infinita, estaba pensando en dejarlo todo, en dejar el equipo de mi abuelo, del que fue socio, todavía conservo su carnet, el equipo de mi padre, del que fue socio, ya no va al campo, el equipo de mi hermano fallecido del que fue socio, el único equipo que he tenido en toda mi vida. La única razón que me mantenía atado a este equipo sucedáneo se había esfumado. A finales de año no renovaré mi abono, ni el de mis hijos, después de tantas generaciones de atléticos han conseguido separarnos de esta pasión, les podría perdonar todo el daño económico y social que han hecho al club, pero esto es un ataque directo a mi familia y nunca se lo podré perdonar.”

Me impresionó profundamente el mensaje de esta persona (forista, se dice ahora) y las reacciones en cadena que provocó, de unos relatando también su desánimo y cansancio, su sensación de pérdida y de lucha injusta, mientras que otros reflejaban su rechazo a las nuevas modas que pueblan nuestras gradas, a las consecuencias del fútbol moderno que tanto nos alejan del deporte que amamos.

En medio de la amargura alguien apuntó que pese a todo esto, no podía pasar sin el Atleti. Les transcribo sus palabras de forma textual... “En mi caso, dejar mi abono, mi localidad, mi asistencia al Calderón partido tras partido, me produciría una muerte en vida. Me convertiría en una especie de zombi. No, pese a que el club y la afición del Atleti del siglo XXI ya no se parecen a los que yo conocí de pequeño, no podría hacerlo. No sé cómo explicarlo, pero este club, esta camiseta rojiblanca y este escudo han marcado tanto mi vida que sería prácticamente imposible para mí dejarlo a un lado.”

Y poco a poco, algunos fueron contando qué les llevaba al Calderón cada domingo. Los que vivían lejos y hacían un esfuerzo, los que provenían de una tercera generación de atléticos, o en los que ese sentimiento había nacido de forma espontánea, incluso en la más absoluta soledad. Y es en ese momento cuando me sentí tan terriblemente identificada con ese grupo de gente que conseguía en un margen muy pequeño de tiempo transformar su hastío en esperanza, su cansancio en ilusión.

Muchos de nosotros, los que lo tuvimos fácil porque en nuestra familia eran rojiblancas hasta las sábanas y mamamos el sentimiento desde la cuna, conocimos a un Atleti capaz de lo mejor. Perdía partidos, claro, pero tenía la garra y el coraje para enfrentarse ante el más grande y plantarle batalla. Ese Atleti mañana saldría al Nou Camp a llevarse la eliminatoria.

Yo le pido a este otro Atleti que no deje que el niño que no quiso ir al fútbol, el hijo de un forero llamado “Luiqui”, no tenga abono la próxima temporada. Que ese niño no crezca sin conocer a ese equipo, que nos hizo diferentes y, en ocasiones, tan felices.

21 comentarios:

Anónimo dijo...

IMPRESIONANTE!! Enhorabuena por este gran articulo.

Fran Omega dijo...

Esta vez me va a resultar imposible escribir mi típico ladrillo, porque no tengo palabras.

¿Puede ser lo mejor que te he leído?.

Enhorabuena y un beso.

Anónimo dijo...

Impresionante, Hele.

Este Atleti, el que jugará mañana en el Nou Camp, poco o nada podrá hacer por ese niño, porque este Atleti no es el Atleti. La única motivación que puede encontrar ese niño es saber que existen otros niños como él y que, quieran ir o no al fútbol, nunca estarán solos.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Hola Hele:

En mi artículo publicado hoy en La Vida en Rojiblanco, manifiesto por primera vez públicamente mi deseo de pertenecer a SdH. Uno de los miembros del Grupo 51 ya lo es, y otros dos queremos formar parte de vosotros, porque tal y como cito en dicho artículo ... "Yo ya he tomado mi primera decisión firme y seria: hacerme de Señales de Humo, que son los únicos en los que yo respiro algo de ese Atleti que tanto añoro y que tanto echo de menos. Y, a partir de ahí, a colaborar y a construir todo lo que pueda en benificio del Atleti. Por algo se empieza.".

Y, créeme, una de la que más me ha convencido de dar este paso eres tu, y, ojo, no comiéndome el tarro delante de unas cervezas intentando convencerme de dar ese paso. Que va. Jamás lo has intentado, de hecho.

Son, precisamente, artículos como este que has escrito, lo que me ha convencido por completo el unirme a vosotros. A base de leerte a tí y a otra serie de fantásticos blogueros que hay por ahí (tipo Cochise, al cual admiro profundamente). Y no voy a ir solo, que al Rafita le tengo también ya medio convencido.

Un besazo, guapa. El próximo partido te doy un toque y nos tomamos unas birras, que quiero concretar contigo este tema.

Ángel R. dijo...

Buenas,muy buen post,mañana el Atlético saldrá al Camp Nou ha pasar el tramite,y si no,ver la convocatoria con Forlán en Madrid,hay que ir a por ellos,pero no lo ven así,saludos!
www.atleti1903.blogspot.com

Anónimo dijo...

Y así es. El Atlético de Madrid auténtico ya casi no existe. Cada día se va perdiendo más y más. Mi ilusión baja mucho, no hasta el punto de no hacerme abonado, pero falto cada vez a más partidos.

Genial Hele.

un abrazo.

Billie dijo...

Muy bonito. Yo no sé si ya queda sitio para romanticismos en este frío Atleti que nos han creado. Lo que sí tengo claro es que la deserción es el camino más fructífero, la deserción momentanea claro y bajo un barniz de beligerancia. Creo que valdría la pena hacer una peña para ver los partidos entre Atléticos de verdad y sólo viajar a los desplazamientos llenos de pancartas contra la directiva. No comprar ni una entrada, ni una camiseta... nada. Estoy convecido de que no hay una pléyade de aficionados esperando para abonarse. Eso es una mentira como un templo. Si nos vamos, ellos se irán y entonces será el momento de volver. Un saludo.

Manchego Curado dijo...

Le ha quedado a Vd esto lindísimo. Besicos.

Manchego Curado dijo...

y qué canción
madre mía

Hele Atlética dijo...

Muchas gracias a todos. Creéis que tenemos algo que hacer esta noche? No juega Forlán.

Anónimo dijo...

Sinceramente, Hele (y sabes que suelo tener el optimismo por bandera), no.

Todavía no hemos jugado contra ningún equipo de los de nuestro nivel (o de nuestro supuesto nivel) con el equipo de gala. Es algo superior a las fuerzas del imbécil de entrenador que tenemos. Ni los dos partidos del Madrid, ni los del Barsa, ni en Valencia, ni en Vila-Real, ni frente al Sevilla, ni los 2 del Liverpool ...

Es evidente que debe de rotar, pero que lo haga con los rivales más débiles, ¿No crees, Hele?

Pues no. El papanato este pacha de todo.

El sacar hoy el equipo de gala, era un claro mensaje al Barsa para decirle, "ojo, que somos el Atleti, un grande, y jamás nos rendiremos", y, de paso, decírnoslo a nosotros mismos, que tampoco andamos muy sobrados de ánimo. Pues nada. No hay forma humana con este hombre.

Calculo que sobre el minuto 15 - 20 de la primera parte iremos ya palmando 2-0. Casi mejor, que yo me levanto muy temprano.

Un beso, socia.

Anónimo dijo...

Hola Hele, bonito post.
Tras el partido del Barça yo también sentí ese desencanto del que hablas. Ese dejar de creer, ese querer dejarlo todo de ‘Luiqui’.
De hecho, este domingo experimenté por primera vez en mi vida la experiencia de ir solo al fútbol. Y en esa soledad, las derrotas aún duelen más.
Ojalá esta noche, aunque no pasemos, rindan cara la derrota y al menos podamos sentir cierto orgullo de nuestro equipo.

Un beso!

Fran Omega dijo...

Pienso que fue muy mala suerte que nos tocara el Barça. La verdad es que veo el resto de las eliminatorias, y se me cae el alma a los pies.

Y eso, cuando estábamos bien. Porque lo estábamos, ¿eh?. No digo nada ahora, enmedio de este inexplicable cataclismo.

Así que, si vi al Barça inaccesible cuando, en diciembre, salió el sorteo y jugábamos con solvencia, el ambiente era o parecía ser estupendo, goleábamos a los que son inferiores, etc, etc ... lógicamente no puedo verles accesibles ahora.

Les pido que den la cara, que no nos obliguen a morirnos de la vergüenza ... y ojalá, con su rendimiento, me enchufen al televisor esta noche. Es como pedir muy poco y mucho al mismo tiempo, ¿verdad?.

Anónimo dijo...

Pues no voy a dejar esto en 13 comentarios precisamente hoy

Dr. Caligari dijo...

Muy bueno el articulo y la canción, sí

cochise dijo...

Pa mí sí.
Es lo mejor que he leido a Hele.

Siendo Hele + otro atlético + otro más + un niño del Atleti+...

Putas lágrimas.

Dr. Caligari dijo...

Gracias!

Manchego Curado dijo...

Gracias, linda. A mí es que Johnson me mola, me cae bien, me parece un talentazo y me recuerda a mi amigo Jorge, que tiene un niño que se llama Hugo y que es igual. Pero no igual para ser como Johnson, no: es igual de manera natural. Y mi amigo Jorge está entre divertido,contento, orgulloso y preocupado por cómo se lo tratará la vida. Así que cada vez que hablo con Jorge me siento más orgullosa de mi amigo. Y te lo quería contar porque sé que quieres mucho a tu padre. Muchos besos. Y gracias.

Paternoster dijo...

Me ha conmovido Dnha. Hele.

Siempre me preguntado, despues de conocer a atleticos como usted, Carlos Fuentes, MJ Navarro, Don Fran Omega, etc. etc.

Con su inteligencia y con su gran amor al Atleti, como es posible que no hayan podido echar a los 2 paletos que rigen al Atleti?

Como fue que dejaron que pereciera el plazo para que fueran mandados a la carcel?

En que fallasteis?

Un Saludo !

Anónimo dijo...

Siempre leo con gusto tus artículos, pero esta vez has estado sublime. Reflejas y sintetizas perfectamente lo que pensamos los seguidores atléticos de toda la vida: la enorme duda que alternativamente nos embarga entre el abandono y la permanencia.
Un beso B.

Borja Corchado dijo...

Gran artículo. Es cierto que, a veces, la desilusión te gana. Mi padre fue, durante muchos años, socio y después abonado, es un gran seguidor del Atlético, pero se ha cansado de ver cómo la familia Gil se está cargando el club. Mucha gente prefiere dar un paso atrás antes que seguir sufriendo.

Te propongo un intercambio de links. Mi blog es www.lavozcolchonera.com

Saludos